Una rosa desaparece...

Les ha ocurrido a ellas pero Podria ser a una de nosotras, a una de nuestras amigas, a alguna conocida de vista, a cualquier ¨niña¨, que como nosotras, está empezando a descubrir muchas cosas nuevas. Sólo hay que ver la desesperación reflejada en el rostro de esos padres desolados y pensar que podrían ser los tuyos, que podrías ser tú la niñita a la que esperan todavía en casa para que les diga que todo esto ha sido una horrorosa pesadilla, que ya ha pasado y que podrán seguir viviendo la vida como la estaban viviendo. Pero es imposible; no va a llegar nadie a decirles eso. Y todo porque cierta o ciertas personas han cometido el gran…no existe palabra para ese hecho; no existe castigo por haberlo cometido. Bueno si…esas personas que se dedicaron a hacer tantísimo daño merecen que se les pague con la misma moneda, que dejen de existir para siempre como lo han hecho ellas, que no vuelvan a tener la oportunidad de respirar ni una sola vez…

No me gusta sacar mi parte violenta, pero sinceramente es lo único que puedo hacer hablando de esto. Ahora junto mis manos, rezo e imploro al Señor que cuide de esas niñas allá donde estén y que les de mucha fuerza a sus padres para que puedan seguir adelante. VA POR ELLAS!

MARTA DEL CASTILLO

                                                                                       MARILUZ CORTÉS

NO VERLO Y CREERLO

No lo veo, claro que no. Pero puedo sentir que está aquí conmigo, que nunca me abandona, que me escucha cuando lo necesito. Que de una manera y otra me hace ver lo que hago mal y me da un pequeño impulso para levantarme cuando me caigo. Podría decir Él no existe, que todo es mera casualidad, pero no; es eso consiste la fé ¿no? En creer en algo que no ves pero que de alguna manera te influye. En este caso, así soy yo; una persona de fé, que cree aunque no ve.

María Clavijo y Cristina Marchán

ES IGUAL QUE YO; SOY IGUAL QUE ÉL

No hay empatía suficiente para que nos sintamos capaces de comprenderles. Sólo ellos saben lo que es PARECER diferentes a los demás. Por muchas cosas que hagamos para que se sientan felices, sólo conseguimos una sonrisa y una felicidad aparente. Sé que hay muchas cosas ahí dentro que les gustaría expulsar; hay demasiadas personas que les hacen sentirse mal. Aydémosles a eliminar esa coraza que les impide ser similares al resto de la sociedad. Dejémosles que caminen por la vida a sus anchas; se lo merecen. A mi personalmente me encanta ayudarles y hacerles sentir bien. No necesita nada a cambio; me conformo con una sonrisa.

Y todo porque hay personas que esconden mucho detrás de su mirada. Hay miradas que esconden personas.

María Clavijo y Cristina Marchán

VERDADERAS PERSONAS

Personas,que llegan a nuestras vidas, de una forma u otra, que en poco tiempo o tal vez en mucho tiempo, se convierten en una parte fundamental de ella. Pero a veces la cuestión es...¿por qué?¿por qué esas personas son tan importantes para nosotros,si ni siquiera llevan nuestra sangre? Y con esto me refiero a la palabra amigos,que alomejor muchos no saben lo que es un amigo de verdad. Y muchos otros, tampoco saben distinguir entre un conocido, que te da los buenos días todas las mañanas o un verdadero amigo, que estará ahí por siempre o para siempre. Por eso nos debemos sentir afortunados, los que podemos presumir de algo tan maravilloso, algo parecido a un premio que nos regala la vida. Encontrarnos con una persona que le da lo que le falta a tu personalidad para ser totalmente perfecta.

Y hay varias formas de saber si tienes el derecho de llamar por el nombre que se merece a esa persona que ha aparecido en tu camino...

Si ella con una sonrisa te lo intenta explicar todo, si ella a pesar de estar haciendo algo, para y te escucha, si ella es capaz de entenderte, si ella también tiene un consejo diferente para cada situación, si te das cuenta que juntas el tiempo se convierte en oro, si las horas se convierten en segundos y si cuando te paras a pensar te das cuenta de que todos los días te alegras de haberla conocido, por alguna razón o por otra... Estate tranquilo, porque puedes decir que tienes a tu lado: UNA GRAN AMIGA.

Cristina Marchán y María Clavijo